Como todo el mundo sabe las urracas son unas aves muy curiosas que construyen su hogar con objetos que encuentran en su camino. Tras esta filosofía, la autora de ‘El baúl de doña Urraca’ ha transformado objetos de uso cotidiano que, en principio, ya han perdido su utilidad inicial y pasan a ser residuos en otros totalmente diferentes que ahora poseen un doble valor: el decorativo y el funcional.
Cualquier material, por sus diferentes características, nos ofrece múltiples posibilidades de forma, color, textura, tamaño... que pueden ser motivo de inspiración para una nueva creación.
La exposición está formada por una veintena de piezas ornamentales como jarrones, espejos, lámparas, centros de mesa, relojes... y también una colección de joyas bajo la misma filosofía donde botones, vitolas de puro y cristales de lámparas cobran protagonismo.
Así pues, ‘El baúl de doña Urraca’ es una muestra de objetos decorativos realizados con objetos reutilizados y de desecho, cuya función original está muy lejos de su nuevo uso.
Cristina Martínez Raurich
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